Uno de los elementos más importantes a la hora de hacer streaming, es la cámara. Una cámara para streaming debe tener unas características mínimas para que puedas emitir los directos y los contenidos con una calidad óptima acorde a estos tiempos.
Cuanto más presupuesto tengas, mejor cámara podrás comprar. Pero también puedes encontrar modelos con una relación calidad-precio estupenda en el mercado. Para acertar, no dudes en considerar los aspectos que analizamos a continuación.
A la hora de elegir una cámara para streaming, son varios los factores que debes tener en cuenta. Principalmente, hay dos tipos, dado que se puede utilizar una cámara tipo réflex o una webcam para el ordenador.
Una de las primeras dudas que tienen muchos creadores de contenidos, es acerca de la cámara con la que empezar a hacer sus directos.
Si bien es cierto que existen webcam en calidad 1080p que tienen un precio muy reducido en comparación con una cámara de vídeo profesional, con lo cual, para empezar puede ser más que suficiente.
La clave está en empezar ofreciendo unos vídeos de calidad, dado que si se te ve borroso o a trozos no será agradable. De hecho, aunque emitas contenido muy bueno puede que el usuario directamente no se quede contigo para descubrirlo si ve que ni siquiera se te ve como debería.
Por ello, en función de tu presupuesto puedes considerar una opción más profesional o más intermedia. Si tienes poco presupuesto, una webcam 1080p te llega para empezar.
Una de las fundamentales, como ya comentamos, es la resolución. Aunque hay quienes se conforman con 1280×720 píxeles( 720p), si quieres hacer vídeos de una mayor calidad elige una webcam de 1920×1080 píxeles (1080p). Es una de las partes más importantes a tener en cuenta a la hora de comprarla.
Aparte de la calidad de imagen, también te puede resultar interesante elegir en función de la facilidad de uso. Aunque por lo general todas se manejan de la misma manera; se enchufan, se configuran y están listas para usar. Pero si no posees demasiados conocimientos, puedes preguntar por una que se instale más fácil.
También es interesante tener en cuenta la compatibilidad con diferentes plataformas de streaming, dado que hay cámaras que ya vienen con esta integración y que facilitan mucho las cosas. Sin duda, hace que todo sea más cómodo.
El control de enfoque automático es otra prestación que está muy bien y que es importante considerar, dado que así verás que te enfoca directamente a la cara y que graba mucho mejor. Se ve con más calidad.
Por último, lo de que tenga el micrófono integrado realmente no nos interesa, porque a la hora de hacer streaming es mejor tenerlo aparte. Así puedes tener algo mejor y específico, que se adapte a lo que necesitas.
Si puedes comprar una buena cámara para streaming antes de empezar con los vídeos de tu canal, mucho mejor, dado que así el contenido se verá con una mayor calidad desde el minuto 1.
Claro que, hace años muchos streamers empezaban con lo que tenían y la diferencia de calidad de sus vídeos es abismal de ahora a años atrás. Es completamente normal. Pero si bien es cierto que en tiempos de más competencia, es importante que trates de entrar con unos mínimos de calidad.
Si puedes comprar una buena cámara de salida para dar los primeros pasos en este mundo, mucho mejor. Con el paso del tiempo, si todo va bien y consigues vivir de esto, ya podrás comprarte la mejor cámara y estar a otro nivel.
Cámaras streaming hay muchas, pero elegir una buena tiene un importante valor añadido:
Esperamos que esta guía resuelva tus dudas sobre la cámara para streaming que puedes comprar. Ya ves que hay muchos factores a tener en cuenta y distintas características y tipos de cámara, por lo que solo queda que elijas la que más se adapte a lo que necesitas en este preciso momento.
¿Te ha quedado alguna duda? Pregúntanos lo que necesites para que podamos echarte una mano y que puedas hacer streaming cuando y como quieras.